Inicialmente, la llegada de familias al sector era a través de una postulación o solicitud a la Armada, no debían pagar dinero alguno.
La primera formalización de las Hijuelas entregadas a los cinco colonos de Pantanosa, se realizó en el período presidencial de Don Juan Antonio Ríos (1942 – 1946). Más tarde, en el período de Don Gabriel González Videla (1946-1952), se les otorga título de dominio.
Características de las Casas...
Las primeras construcciones no se hicieron con trazado de calles, los primeros predios posean más de una entrada y las casas fueron construidas con “junquillos” y con los recursos que la naturaleza entregaba, no había otro material.
“Mi papá nos hacía los catres, nos cuenta la Señora Olga Emhart, con maderas, con palitos, las patas las hacía con trozos de revellines que se adosaban a las maderas y los enterraba en la tierra, les llamábamos "patitas de oso" y ahí se le ponían las payasas: sacos de lino unidos y estirados de a cuatro y rellenos con paja, a modo de colchones”.
Abastecimiento de los Colonos...
En las primeras décadas de poblamiento no existía negocio alguno en la zona. El más cercano se encontraba en Frutillar, en éste se compraba: arroz, café, sal, azúcar o harina, todo lo cual se vendía a granel y en bolsas de papel.
Los colonos comenzaron a trabajar sus tierras, siembras y huertas y otras actividades agrícolas, vendían leña o leche, y otros se desempeñaban en la fábrica como obreros, como fue el caso del padre de don Alberto Ruiz. Otras familias se dedicaron a la crianza de animales, como ovejas, bueyes o vacunos.
Los primeros y segundos colonos no vendían sus tierras, sino que las usaban como material de trueque: las cambiaban por comida o por especies, ya que de acuerdo a los documentos, así debía ser.
Segundos Colonos...
Luego se realizó una segunda partida de asentamientos, ello gracias a que muchos de los primeros colonos cedieron parte de sus terrenos y otros, porque, como se requería, solicitaron tierras a la Armada.
Los segundos Colonos en asentarse fueron:
Ernesto Agüero
Esteban Águila
Amelia Miranda
Olegario Miranda
Hilario Guerrero
Francisco Ruiz
Según el relato de don Alberto Ruiz: “esta llegada se produjo entre 1950 y 1952, cuando era presidente Don Gabriel González Videla.
Don Plutarco Serón cedió terrenos a Ernesto Agüero quien a su vez subdividió a varias personas, como a Luis Figueroa y a Don Juan Ruiz Ayancán, padre de don Alberto. Los otros de ésta segunda partida solicitaron hijuelas a la armada.
Nuestra familia, dice Don Alberto Ruiz, se asentó en el año 1954. Yo llegué a la zona a los cinco años de edad y me acuerdo que llegamos en carreta con nuestras cosas, para mí como niño, era como un juego. Primeramente, llegamos a arrendar en los terrenos de Don Ernesto Agüero, él tenía unas casas, o no eran casas en sí, sino paramientos de revellines o estacones. Nuestra familia llegó a vivir a estos terrenos compuesta por mis padres Don Juan Bautista Ruíz Ayancán y Zulema Barría Paredes y ocho hijos: Orlando, José Miguel, Pedro, José Del Carmen, Juan Mamerto, Olga, José Carlo y yo, Alberto. Luego en el año 1955, nace otra hija del matrimonio; Magalia, la menor. Nuestra familia no tenía camas, dormíamos en “Payasas”, que eran una especie de camas pero llenas de pajas de avena con sacos de pita cocida. Ahora que la familia se había trasladado de sector, mi padre debió también cambiar de trabajo, comenzó a trabajar en la lechera, lo que fue CAFRA y hoy es “Bioleche”.